Hola, chicas preciosas.
Subid al microbús, queridas, próxima parada: La Laguna, allí nos espera Özgür y Pablo en el nuevo local ya que esta semana, nuestro chico entregó La Gabbia al primo satánico. Eso sí, después de haberle arreado un buen mamporro sin despeinarse.
Hemos atravesado algunas calles turcas por las que no estamos habituadas a transitar ya que nuestro destino, hasta ahora había sido La Gabbia, pero... ¿alguien más tiene la sensación de que nuestro Özgür tiene ases en la manga para recuperar su amado local? A mí es que no me cabe la menor duda. Y por más que se interponga e interfiera «El cuarteto macabro» convertido ahora en quinteto... ¡No van a poder con EzGür!
-Hola, cariño, te siento un tanto molesto. ¿Es por que tu chica está en cierto peligro?-Peligro es mi nombre, querida Elf. Que se atenga a las consecuencias. Ha ganado la set, no el partido.-Bonito sitio, aunque echaré de menos La Gabbia, pero algo me dice que aún hay mucha tela que cortar.-A veces, cuando hablas, no entiendo lo que dices -comenta mientras agita la coctelera con buen ritmo-, pero te diré una cosa: tengo ases bajo la manga.-A veces no me entiendo ni yo lo que digo -le contesto sonriendo-. Y, con respecto a lo de ases bajo la manga... ¡algo me decía que así es!-Eres una chica curiosa, cielo.-Yo más bien diría que estoy como una cabra. Estoy hablando contigo, cualquiera me encerraría.-Estás bien como estás. Toma, bebe esto -dice al tiempo que desliza un vaso con pajita.-¿Pajita de cristal?-Bueno, hay que cuidar el medioambiente y, salvo que se rompan... ¡son reciclables!Por un momento me quedo mirando el vaso de un color bastante intenso, me acerco y lo huelo y el olor me tumba. Tomate, lleva tomate. No puedo ni acercarme al dichoso vaso. Con dos dedos lo empujo hacia él y comienza a reírse.-Muy gracioso.-Lo sé.-¿Qué es?-Un Venganza*. Bien frío, como hay que servirlo. -Y se da la vuelta tras guiñarme un ojo para abrazar a Ezgi y besarla en el cuello. Ezgi sonríe en mi dirección y me lanza un beso al tiempo que sonríe. Son tal para cual.La verdad, no sé de qué me extraño. Bien sabe este canalla que el tomate, a menos que esté pasado por la túrmix y mezclado con otras cosas, es que no puedo ni olerlo.
En fin, el nombre del cóctel va que ni pintado para el episodio que vimos hace unos días, ¿no os parece? Se sirve bastante frío, como la venganza real. La que más gusta a todos. La que se fragua poco a poco para derrotar al enemigo en su propio terreno. Que no se vayan a creer Irem, Serdar o Tolga que nuestro chico va a dejarles el camino libre. De eso nada. Y mirad que son intrigantes, Tolga incluso ha tomado la decisión de colocar un caballo de Troya en La Laguna, de eso no me cabe duda alguna tras ver los trailers.
Pero parémonos en ellos por unos instantes. Más concreto voy a hacer una leve parada en Irem. Me ha sorprendido este personaje. Lo juro. Pedazo actriz. Lo demostró en dos escenas bastante intensas, la primera en el despacho de Tolga y luego en la consulta de Serdar. Menudos cojones le echó la tía. Me dejó muda. Su cara de rabia fue como presenciar una catarsis del personaje. De la fría abogada a la intensa amante despechada o mujer que se sabe en el punto de mira para acabar en la cárcel si se descubre lo que ha hecho. Pero... ¡ahhh! ¡Justicia poética, querida! No te podrán emplumar por lo que hiciste en el evento que Ezgi preparó pero te emplumaron bien por lo que hiciste en tu propio despacho de abogados al manipular los derechos de concesión de la licencia, los documentos de La Gabbia. Por más lista que tú seas... más lista y hábil es Deniz.
Y hablando de listos... ¡Pablo! ¡Emre! Éste de tonto tan poco tiene un pelo. Anda que no ha calado bien a la Gimze. En cuanto hablan de un posible topo... sabe que es Gimze quien filtra la información a Tolga. Lo sabe pero no tiene pruebas, se las ingenia para conseguirlas pero la muy ladina se cosca de la corrida. Por eso es más que divertido el papel que ejerce a lo largo de todo este episodio.
Pero vamos con Özgür y Ezgi y esa conversación en el coche mientras van camino de La Gabbia. Tras esa conversación menos se entiende la actitud de Tolga. Osea, que tu padre pierde el negocio familiar por su adicción al juego, tu tío paga el doble por la propiedad para recuperarla... ¿y tú eres la víctima? ¡Te quieres ir, perejil!
-¿Perejil? ¿Qué quieres decir con eso?-Una frase hecha española.-Como muchas de las que salen por tu boca. No hay quien las entienda.No podéis verme, pero acabo de cruzar los brazos sobre la barra del bar de La Laguna y esconder mi cabeza entre ellos.
Avancemos. Volvamos a Tolga... pasando por Gimze. Le faltó tiempo a la tía para llamar a Tolga y decirle que los «4 Magníficos» iban hacia el hotel a revisar las cámaras de seguridad. Le faltó tiempo. Obviamente se toparon con un callejón sin salida del que sólo se puede salir de una manera: retrocediendo.
Pero continuemos con él. Está enfermo de odio, enfermo de verdad. Con qué ganas le dice a Özgür que La Gabbia a cambio de no comprometer a Ezgi en una investigación judicial. Creo que nuestro chico se quedó corto al llamarle «Patético». Pero muy corto. Ahora eso sí, cuando firmó los papeles de cesión final de La Laguna... algo en mi interior me dijo: «Acabas de firma tu sentencia de muerte» (figurada, eso sí).
Pero cambiemos de tercio. Vamos ahora con otra pareja cuyos componentes suman un trío. Centrémonos en ellos por unos instantes. Me gusta mucho la evolución de la niña cabrona. Zeynep por fin se da cuenta de la clase de persona que es Cansu: una mujer divertida, a la que no le importa aparcar sus responsabilidades laborales para pasar toda una tarde con ella. Se amolda a sus caprichos, es capaz de disculparse con su prima y dejarla e irse de La Gabbia porque a la niña antojadiza se le mete en las narices que ya está bien de estar allí y lo hace con maldad la hija de su madre, intencionadamente. La cara de «rabúa» que pone la niña mientras sorbe de la pajita es de los mejores momentos que he visto en la interpretación de una criatura. Esta niña va a ser una grande, al tiempo, lo mismo digo de la hija adoptiva de su tocaya en DEK. Me gustó que se disculpara ante su padre por su actitud. Me gustó mucho. Veremos a ver cómo se desarrolla su personaje a partir de ahora.
Mientras que esa relación a tres se va consolidando... la de Ozan y Deniz también va por buen camino. Ambos se compenetran a la perfección, es una pareja bien avenida, sin grandes dificultades en el camino (al menos aparentemente) y que nos da visos, sin histrionismos y sin recurrir a factores externos, de lo que realmente es una relación real de los de a pie.
Esta serie es lo que tiene. Las relaciones de todos sus personajes son reales. La naturalidad de la convivencia, del día a día entre una pareja que conocemos como «parejas de hecho». Como la tuya, como la mía (si la tuviera, claro). Es lo que observas en tu entorno: entre tu hermano y tu cuñada (si los tienes), entre amigos que conocen al chico o la chica con la que comparten su vida. Y si a todo esto le añadimos los condimentos de la estabilidad y la confianza... el resultado es creíble. Muy creíble.
Y con respecto a madres y padre... pues nada nuevo en le horizonte. Poco a poco irán dando su brazo a torcer. Unal, en su línea de pacificador y de Pepito Grillo. Me encanta su vena conciliadora de aquí paz y en cielo... gloria.
No hay mucho más que comentaros que me haya podido llamar la atención sobre este episodio en concreto. Nos quedaremos por unas horas más intentando dilucidar qué pasó por la cabeza de Tolga para hacer arrestar a Ezgi. Sí, sé que ella es el punto débil de Özgür. ¡Entregó La Gabbia por ella! Nada más que añadir. Tolga va a aprovechar esta debilidad hasta lo indecible, veremos hasta dónde puede exprimir el limón antes de que las gotas díscolas le caigan en los ojos y tenga que salir corriendo a Urgencias.
Nada más por aquí. Decir que me encantó cómo Levent despide a Serdar por sus tejemanejes (bravo, Irem, venganza de la buena aunque sea en caliente) y cómo a Özgür le descoloca su no paso al frente de Gimze. Veremos a ver también en unas horas como es que esta crápula acaba en La Laguna. A saber de qué artimaña se vale para hacerlo después de haber tenido la soberbia de enfrentarse a él y decir que si no la llevaba en calidad de CM... renunciaría.
Bueno chicas, nos vemos en el análisis del siguiente que algo me dice que va a ser apasionante. Besos a todas. La próxima vez... ¿acudiremos a La Gabbia o a La Laguna? ¿A dónde os gustaría ir?
Como siempre muy acertada!! Y la verdad es que el primo es un enfermo y esa enfermedad le causrá su destrucción y el Doctorcito idem de lo mismo.
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